lunes, 25 de octubre de 2010

Segundo repique a Marciano

    Se dice que uno de estos dos señores es Marciano.

Artículo 57 de la constitución.
No se permite el anonimato…...

“El chavismo está obligado a suscitar el debate… Vamos, pues, al debate. Con todas las cartas sobre la mesa. Con todas las pruebas. Con todos los prontuarios…..”.
José Vicente Rangel, en su columna de Junio 2010.
Y entonces?….

Hace algunos días quien se firma Marciano en el diario VEA me acusó de corrupto. Dijo que yo era de “lo peor” de la cuarta república y me dedicó algunos procaces insultos. Este ataque generó una situación asimétrica porque yo no sé quien es Marciano, aunque mucha gente dice que es José Vicente Rangel. Si Rangel fuera Marciano uno tendría que preguntarse que necesidad tiene alguien quien fue hasta vicepresidente, ministro de la defensa y canciller, aunque fuese en esta Venezuela prostituída, de esconderse detrás de un pseudónimo? Tendrá una razón legal, financiera, periodística o de simple cobardía? Que triste debe ser esconderse detrás de un pseudónimo y no poder actuar libremente ante el mundo.

En vista de esta situación lo que hice fue retar a Marciano a salir del closet, para que documente las acusaciones que me ha hecho desde el anonimato, debata publicamente conmigo sus acusaciones y me permita exponer mi opinión sobre la persona que Marciano finalmente resulte ser. Mi escrito, publicado en ND, se acerca a unas 6000 lecturas en http://www.noticierodigital.com/forum/viewtopic.php?t=703414  pero hasta ahora no tengo respuesta de Marciano. Su columna de hoy evade el tema. Parece que se metió la lengua en el paltó.

Apartando lo desagradable que es ser acusado de corrupto sin que me den una sola razón concreta para la acusación, como yo si la dí cuando llamé corrupto a Jorge Giordani, un debate público con Marciano me permitiría presentarle cuentas a los venezolanos y dar un ejemplo de transparencia ciudadana ante una sociedad cansada de tanta podredumbre e hipocresía.

No es aceptable que un ser anónimo se dedique a insultar impunemente a ciudadanos que si dan la cara. Mi reto no es tanto a Marciano, la persona pequeña, sino al sistema degenerado que el representa.

Tengo unos 20 años estudiando en detalle el problema de la corrupción en Venezuela. Denuncié la corrupción pre-chavista así como denuncio la corrupción chavista, la cual es aun más intensa y criminal, puesto que Chávez llegó a la presidencia por fuerza de su promesa electoral de terminarla, una promesa que ha resultado una cruel burla para los venezolanos. Seguiré en la denuncia, con o sin la aprobación de Marciano.

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